Un buen cercado protege y limita el valioso ganado al presentar barreras para restringir el movimiento de los animales. Las barreras pueden ser físicas, psicológicas o una combinación de ambas. Las barreras físicas consisten en materiales suficientes y lo suficientemente resistentes como para evitar o disuadir a los animales de pasar por encima, por debajo o a través de la cerca. Las barreras psicológicas dependen de infligir dolor para disuadir a los animales de desafiar una barrera física de menor resistencia.
Los materiales tradicionales para cercar al ganado incluyen alambre de púas, alambre tejido, alambre de malla y alambre electrificado, y combinaciones de estos materiales. Las cercas de tableros también han sido populares. Estos materiales convencionales todavía se usan ampliamente y son excelentes cercas si se construyen correctamente. Sin embargo, también se deben considerar nuevos materiales, como el alambre de alta resistencia, al seleccionar los tipos de cercas.
El tipo de cercado necesario para el confinamiento del ganado depende de varios factores, entre ellos, la especie animal, la edad, la raza y el sistema de producción. El ganado vacuno en un sistema de pastoreo controlado tiene necesidades de cercado diferentes a las de los caballos en pastizales recreativos. Los cercados divisorios o de demarcación permanentes requieren materiales de cercado diferentes a los de los cercados para potreros temporales.
El tipo y el material de las cercas influyen en el costo, la vida útil y el funcionamiento del sistema de cercas. Esta publicación analiza los tipos de cercas y materiales disponibles para los sistemas ganaderos y proporciona algunas pautas sobre la selección de materiales de cercas para distintos tipos de ganado.
